Crispación

De un tiempo a esta parte, la crispación se ha adueñado de la vida nacional. Todo, desde los medios de comunicación y el debate político hasta el mundo del deporte y la vida cotidiana parecen haberse teñido de un tono bronco y guerracivilista.

No hay que ver blogs y foros para ver en qué ha quedado la tolerancia y la buena educación. Yo mismo he sido llamado "hijo de puta" por un indivíduo que se autoconsideraba "liberal" y que deseaba que me amputara las manos una prensa (para no poder dar mi opinión, supongo, a lo Victor Jara) por dar mi punto de vista sobre la sacrosanta AVT.

Personalmente, estoy harto. Estoy cansado de este clima. Como un alcohólico anónimo, he empezado mi programa para desintoxicarme. Para empezar, he montado este blog . Mola ¿eh? y, cada vez más, me está entrando una pereza tremenda responder a ciertos indivíduos que se creen los Últimos de Filipinas y que descargan sus complejos y su raquitismo mental en Internet y en ciertas emisoras radiofónicas. Es el precio de la democracia y la libertad de expresión, que pago gustoso, pero me he cansado de pagar yo todas las rondas. Como en el programa de AA, he empezado a tomar conciencia de mi problema y he pedido perdón a personas queridas que hayan podido sentirse afectadas por mis momentos de exaltación política, de los que me arrepiento.

No puedo pasarme el día cabreado por cosas que no me afectan personalmente. Tengo que empezar a disfrutar de la vida sin pensar en Aznar, Zapatero, Acebes, Rajoy, Maragall, Carod-Rovira... que no dejan de ser los malos empleados que pago con mis impuestos para que después me creen más problemas que los que resuelven.

La historia no tiene porque repetirse. No estamos en 1936, como sueñan algunos líderes de opinión. Viviré mi vida como me parece y al que no le guste que le zurzan.

http://www.telefonica.net/web2/proteston/articulos_prensa/savater_2005_09_07.pdf